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martes, 13 de septiembre de 2011

El muñeco diabólico 3.

Ficha:

Director: Jack Bender
Intérpretes: Dakin Matthews, Dean Jacobson, Jeremy Silvers, Justin Whalin, Perrey Reeves, Travis Fine
Título en VO: Child's Play 3. Año: 1991. Duración: 91 min.


Historia:

La vida de Andy sigue más o menos igual que como antes. Después de vencer a Chucky por segunda vez va vagando por varios hogares adoptivos hasta que finalmente acaba ingresando en una academia militar. Por otro lado la empresa juguetera responsable de Good Guy, el muñeco en el que se metió el alma del asesino Charles Lee Ray y que dio origen al muñeco homicida que todos conocemos, tiene pensado continuar con la producción. Grave error, ya que en una de las primeras unidades el alma del Chucky volverá a adueñarse del muñeco y la pesadilla volverá a empezar para Andy.

Opinión:

Pues tercera entrega de la saga dedicada al muñeco asesino por excelencia del cine de terror en el que cambian algunos elementos y se le da un pequeño lavado de cara a la trama. El resultado es que aún siendo lo mismo y sabiendo lo que va a pasar tenemos cierta sensación de frescura y novedad.

Una vez más el único actor que repite es Justin Whalin, el encargado de dar vida a Andy, el chaval de las otras entregas que ahora ya esta más crecidito y tiene en torno a los 15 ó 16 años. Sinceramente me pregunto si el actor, al igual que su personaje, terminó teniendo fobia a los muñecos después de pasarse toda su infancia y adolescencia interpretando estas películas.


El cambio de escenario le sienta muy bien a la saga. Las dos primeras entregas venían a ser básicamente lo mismo pero en esta tercera tenemos la acción pasa a desarrollarse en una academia militar. Esto permite meter todos los tópicos de las películas bélicas en las que vemos un entrenamiento para el ejército. El peluquero obsesionado con cortar al cero, el instructor con sus gritos, las flexiones y carreras nocturnas como castigo, las maniobras de entrenamiento... Todos los cliches están aquí combinados con la mala leche de Chucky. Esta combinación es lo que salva la película del aburrimiento y hace que el espectador no se duerma durante el visionado.

Una curiosidad de la que me he enterado hace poco sobre el nombre del asesino de la película, Charles Lee Ray. Resulta que para ponerle el nombre a este personaje tomaron los nombres de tres asesino reales y los combinaron. Los nombres de los criminales reales son Charles Manson, Lee Harvey Oswald y James Earl Ray. Curioso dato que desconocía por completo.

Me ha costado sentarme a ver esta tercera entrega del muñeco diabólico. La segunda me pareció un aburrimiento total y esta tercera no me motivaba nada de nada. El caso es que, como suele pasar, cuando te pones a ver algo sin ninguna expectativa es más fácil que llegue a sorprender positivamente. Esta tercera parte no es una buena película pero al menos gracias al cambio de escenario y una dinámica diferente no llega a aburrir y proporciona un rato más o menos aceptable de entretenimiento.

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