- Guión:
Ales Kot.
-
Dibujo: Michael Walsh, Tradd Moore, Mateus Santolouco, Morgan Jeske y Will
Tempest.
- Color:
Jordie Bellaire.
- Edición
original: Publicado por Image en los números 1 a 5 de la serie regular Zero.
-
Edición española: Publicado en octubre de 2014 por ECC Ediciones, tomo de tapa
blanda con 160 páginas y 14´95 €.
Opinión:
Hace un
par de años arranco una nueva serie llamada Zero en Image que contaba con Ales
Kot como guionista. Este joven escritor apenas había realizado un par de
trabajos en DC y otras editoriales independientes pero había llamado la atención
de la crítica. Zero es su serie más ambiciosa hasta la fecha. En su momento me
leí los primeros cómics de la colección y me gustaron, pero preferí esperar a
que saliera en tomo, por que la verdad es que cada número deja con ganas de más.
Zero es
el nombre en clave de un espía que desde niño fue entrenado para ser el mejor.
Recuperar documentos, asesinar a objetivos clave o poner fin a organizaciones
criminales son solo algunas de las tareas que Zero tendrá que realizar a lo
largo de su carrera. Cada uno de los episodios del primer tomo nos cuenta una
de estas misiones de manera autoconclusiva, pero también nos da algo de
información de una historia mucho mayor que se va desarrollando en segundo
plano.
Zero tiene toda la pinta de que es mucho más que una historia de espías, me atrevería a adelantar que habrá algo de ciencia ficción a lo largo de la historia. En dos momentos clave de la historia vemos elementos que chocan con el tono realista de la historia. Estos dos momentos están colocados estratégicamente por Kot para que nivel de la serie no decaiga en ningún momento. En un principio parece que en el último capítulo se aclaran algunos puntos de la trama, una mera ilusión ya que las últimas páginas abren nuevas vías a la historia y dejan al lector con un gran cliffhager.
Gráficamente
Zero también es bastante innovador. Cada uno de los cinco episodios que
componen este primer tomo cuenta con un dibujante diferente. Esto en otras
colecciones suele ser caótico y no cuajar pero en Zero la verdad es que termina
siendo un acierto. Cada parte nos muestra un momento determinado de la vida del
protagonista, una misión concreta o algún pasaje determinante de su formación, espaciados
a lo largo de más de treinta años. Por ello cada autor tiene plena libertad
para interpretar al personaje y el guión como le parezca. Solo hay una escena
que continúa de un capítulo a otro y es con la que se abre el tomo.
En
general el apartado artístico no esta mal. Hay un poco de todo, desde un estilo
sucio y crudo como el de Morgan Jeske en el episodio cuatro a otro mucho más
claro y nítido como el de Tradd Moore en el segundo y Will Tempest en el
último. Lo que prima en todos los episodios es la violencia y la sangre. No es
nada gratuito, pero os garantizo que los disparos y puñetazos de este cómic
deben de doler bastante.
Para dar cierta homogeneidad a la serie todos los episodios han sido coloreados por Jordie Bellaire. Esta colorista lleva unos años trabajando sin descanso y se esta convirtiendo en una de las profesionales más destacadas del medio. En Zero se adapta perfectamente al tono de cada historia y el estilo de cada artista. Un gran trabajo.
El
primer tomo de Zero es una muy buena lectura, un cómic de acción y espionaje
que engancha por su crudeza y contundencia. Pero también atrae por la historia,
que engancha desde el principio y hace que el lector quiera saber más del
protagonista y lo que esta pasando. Esta serie promete mucho y, al menos en
este primer tomo, tiene un gran nivel. Ojala al menos se mantenga en esta línea.
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