La historia comienza cuando Jonathan rompe con su novia y se las tiene que apañar solo. Decide dar un cambio de ritmo a su vida y pontenciar su faceta como escritor de novelas de detectives. Para documentarse decide actuar el mismo como detective privado. Cuelga un anuncio en internet y va resolviendo pequeños casos. Estos casos, junto a la relación con sus amigos Georges y Ray, son los ejes por los que se mueve toda la trama.
Jonathan es un tipo algo insufrible y llega a ser algo cansino. No obstante sus amigos Ray y Georges van cogiendo más protagonismo con el paso de los capítulos y se terminan adueñando de la mayoría de los capítulos. Ray es un dibujante de cómics de superhéroes creador de un particular Superman. Tiene puntazos muy buenos.
El trio de actores protagonistas es bastante conocido. Ray es interpretado por Zach Galifianakis, el barbas de Resacón en las Vegas, que más o menos sigue haciendo el mismo papel que en esa saga. El veterano Ted Danson, el mítico protagonista de Cheers, da vida a George. Por último Jonathan es representado por Jason Schwartzman, el menos conocido de los tres. Entre los actores se va formando una química muy buena y se nota que lo pasaron bien en la grabación. Citar también a Olivia Trilby que es la ex de Jonathan y que ya salió en Dredd interpretando a Anderson.
Esta serie duro solamente tres temporadas de ocho episodios cada una. Es una pena por que la calidad general fue de menos a más y el desenlace de la tercera temporada es muy bueno. La trama queda más o menos cerrada pero estoy casi seguro de que la idea era continuar con más episodios.
Bored to death no es una serie rompedora, ni de las que dejará marcados a los espectadores pero esta francamente bien. Tiene muy buen humor y según van pasando capítulos la calidad va aumentando. La verdad es que me ha dado pena no saber como seguían las andanzas de estos tres tipos, les he cogido cariño.
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