La historia esta situada en las semanas posteriores al final de la primera temporada. Espartaco junto al resto de los gladiadores fugados continuan escapando de las tropas romanas mientras liberan a todos los esclavos con los que se cruzan. Desde Roma los altos cargos comienzan a impacientarse y terminan enviado a Glaber para acabar con los fugitivos ya que el fue es uno de los responsables de la revuelta de Espartaco.
La principal novedad de esta nueva temporada fue el cambio de actor para interpretar al protagonista. Andy Whitfield desgraciadamente falleció en el año 2012 a causa del cáncer y solo pudo rodar la primera temporada. Para esta se eligió al actor Liam McIntyre y la elección no pudo ser más acertada. Físicamente ambos actores se parecen mucho y McIntyre hace una interpretación de Espartaco muy buena. No solo destaca en las escenas de acción si no también en las más pausadas donde el personaje se pregunta a donde le esta llevando toda esta revuelta o cuando da algún discurso a sus compañeros.
La serie recupera algunos personajes que parecía habían dejado la serie. En el primer capítulo vemos de nuevo como Lucretia poco menos que vuelve de los muertos para buscar ajustar cuentas con los que conspirarón contra su marido y destruyeron el ludus. Otro que vuelve es Gannicus, uno de los mejores personajes de la serie y que en esta temporada vuelve a demostrar por que era el campeón. Tiene un pequeño duelo con Espartaco que es uno de los momentos más épicos de la temporada.
De los veteranos me ha gustado mucho el cambio que poco a poco ha ido dando Crixus. En la precuela le vimos como un novato con ambiciones que conseguía llegar a campeón, status que tenía durante la primera temporada. Aquí le vemos mucho más humano y no tan salvaje como en anteriores ocasiones.
En el bando de los romanos Glaber tiene mucho más protagonismo que en anteriores ocasiones. Este personaje comienza como un tipo misterioso, que siempre parece que se guarda un as en la manga, y no tarda en revelarse como un tipo realmente peligroso. Su esposa comete el error de maquinar en su contra y lo pagará con creces. Uno de sus principales hombres es Ashur cuyo papel en este temporada es aún más retorcido que en las anteriores. Ambos reclutaran a un grupo de "operaciones especiales" para ajustar cuentas con Espartaco y los suyos y cuyos componentes dan miedo.
Las batallas son aún más espectaculares que en las anteriores entregas. Los personajes ya no se limitan a luchar en el circo o en combates de entrenamiento, ahora vemos grandes batallas entre los antiguos gladiadores y soldados romanos. Cámara lenta, sangre puesta por ordenador y algunas de las muertes más espectaculares que recuerdo es lo que nos encontraresmos en estos combates. Eso si en algunos momentos se han pasado con el uso del ordenador. Los personajes sueltan un chorro enorme de sangre para luego solo tener un pequeño corte que para el siguiente capítulo ya esta curado.
El desenlace guarda unas cuantas sorpresas y deja el elenco de personajes bastante mermado. Algunos de los personajes protagonistas desde el primer capítulo terminan muertos. En algunos casos era de esperar pero en otros me ha sorprendido bastantes.
Me encanta esta serie y puedo afirmar sin duda que es mi favorita de las que sigo actualmente. Esta temporada ha sido emocionante y con momentos realmente memorables. Cada capítulo tiene al menos un momento en el que te deja con la boca abierta con un giro inesperado o con una revelación sorprendente. Una lástima que solo quede una temporada ya que la historia finaliza en la tercera temporada. En breve me pongo con ella.
1 comentario:
Una pasada de temporada, cañera y con un ritmo que no decae.
Muertes, sangre y tetas... solo le falta heavy metal a la banda sonora y ya sería perfecta.
Que ganazas de ver la tercera y última temporada
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